Tras la buena imagen dejada ante el Villarreal el pasado domingo el Atlético de Madrid se enfrentaba hoy a su gran asignatura pendiente: los partidos fuera de casa. Antes del inicio había cierta incertidumbre por ver que alineación sacaba el “Cholo”; si volvía a presentar un equipo excesivamente rocoso como en la Rosaleda ante el Málaga, o si por el contrario volvía a apostar por el mismo once que empleó la jornada anterior y que enamoró a la afición rojiblanca.
El argentino se decantó por la segunda opción; si algo funciona, ¿Por qué cambiarlo? Por tanto, la única modificación del once fue la entrada de Mario Suarez acompañando a Gabi en el doble pivote por la baja de Tiago.
Enfrente una Real Sociedad que llevaba invicta las últimas siete jornadas y que la semana pasada consiguió “mojarle la oreja” al Valencia de Soldado y compañía.
El partido se preveía igualado pero en el minuto 2, sin dejar apenas tiempo al espectador para engancharse al partido, Diego la pone para Falcao y un defensa donostiarra intercepta con la mano. Penalti y gol del Tigre, que desde que Simeone llegó al banquillo parece haber recuperado su instinto goleador.
Demasiado bueno para ser verdad, las cosas no se podían poner más de cara para el equipo colchonero. De hecho, poco después, la Real comenzó a atacar buscando a Aguirretxe con balones largos de Griezmann y Carlos Vela que fueron los jugadores más activos. El ariete vasco tuvo una buena ocasión después de empalmar una volea tras un buen centro desde la banda.
El Atlético defendía con solvencia, sí sí con solvencia, parece que Godín se ha convertido (por fín, ya era hora) en el líder que el equipo necesitaba en la retaguardia y Miranda salvando un par de acciones, donde le faltó picardía, se mostró bastante seguro. Por otro lado, a la hora de defender pudimos ver tanto a Diego como a Arda Turan ayudar una y otra vez a los laterales. El turco se hinchó a recuperar balones haciéndole las coberturas a un Filipe que quitando alguna jugada en ataque, estuvo demasiado lento durante todo el encuentro.
Por su parte, Gabi y Mario presionaban a partir del centro del campo para recuperar balones y conectar con los cuatro de arriba. Tuvieron ratos en los que ambos estuvieron bastante espesos, sobre todo el segundo que no tuvo su noche.
Si la mano del Simeone se nota a la hora de defender, no podemos decir menos en cuanto al ataque. Las premisas están claras; recuperación y balón a Arda, Adrián o Diego (preferentemente al brasileño) para llegar lo más rápido a la portería rival y buscar a Falcao. Cuando combinan estos cuatro jugadores siempre hay sensación de peligro y más aún si se suman los laterales como ha sido el caso de Juanfran durante todo el partido. El ex de Osasuna estuvo enorme durante todo el encuentro demostrando que el Cholo también valora cosas como la entrega y la lucha. Podrá tener alguna laguna en defensa pero la subsana con las ganas que le echa sobre el césped.
Así comenzaron a llegar las ocasiones del Atlético; Adrián falló una ocasión clarísima a pase de Juanfran, Arda y Diego intentaron algún disparo lejano y Falcao se lanzaba a rematar todo lo que pasaba por el área donostiarra.
A todo esto la Real seguía a lo suyo y únicamente creaba peligro cuando Vela o Griezmann conseguían desbordar o si Aguirretxe recibía algún balón cerca del área. En los últimos diez minutos acorralaron al Atletico pero este se mantuvo muy sólido. Entre todo esto terminó la primera parte.
Nada más comenzar el segundo tiempo llegó otro gol del Atlético de Madrid, además en una gran jugada que Adrián culminó a la segunda. Juanfran le tira la pared a Falcao que se la devuelve picada dentro del área de la Real para que este se la ponga a Adrián que entraba sólo al segundo palo. El primer remate de cabeza lo para Bravo pero la fortuna se alió con el asturiano, ya que el rechace le cayó a los pies para marcar a placer.
Con el segundo gol la Real se quedó “grogui” y el Atlético dominó completamente el encuentro creando bastantes ocasiones de peligro. El dominio sobre el juego se acentuó cuando Mario fue sustituido por Assunçao, que le dio más consistencia al centro del campo.
El cuadro rojiblanco era tan superior que incluso Simeone se atrevió a cambiar a Diego y meter a Koke en el terreno de juego. Por cierto, el canterano dejó detalles de bastante calidad en los minutos que disputó. Uno de ellos es el pase que le mete a Falcao para que este marcase el gol de la sentencia con un disparo picado espectacular que sorprendió a Claudio Bravo. Con este gol espero que caiga el famoso mito de que el colombiano solo sabe marcar goles de cabeza porque su segundo tanto esta cargado de clase.
Pero aún faltaba lo mejor antes de que acabase el encuentro; Falcao toca en el pico del área para Koke, que la deja pasar para Dominguez (que había entrado por Arda), este se la devuelve al medio rojiblanco para ponerla al corazón del área donde, quién sino, el Tigretón Radammel Falcao iba a aparecer para marcar de nuevo y llevarse el balón a casa.
Final del partido y primeros tres puntos que el Atlético de Madrid consigue fuera de su feudo demostrando una gran mejoría desde la llegada del “Cholo” que ha conseguido instaurar orden y solidez a la hora de defender y velocidad al atacar.
Luis Eduardo López González Follow @LuiSe_LopezGonz
0 comentarios:
Publicar un comentario