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lunes, 7 de mayo de 2012

Es nuestra noche


12 de mayo de 2010. Jamás podremos olvidar esa fecha, la mejor noche que pasamos como seguidores del Atlético de Madrid. Recuerdo con perfecta nitidez aquel 12 de mayo, en el que el  Glorioso hizo, una vez más, honor a su nombre, venciendo agónicamente al Fulham inglés. Pero muchas cosas han cambiado desde ese día. De hecho, prácticamente nada es igual, excepto nuestra pasión. Eso nunca cambia
Jamás podremos olvidar una noche tan especial.



Al igual que en esta ocasión, disputamos la final un miércoles en la semana de la última jornada de Liga. En ese año, terminamos la competición el fin de semana del 15-16 de mayo, perdiendo frente a la Peña Madridista Getafe en su futbolín y acabando novenos. También fuimos madrugadores para terminar la Liga, ya que pocas semanas después nos tocaba jugar y ganar el Mundial.

Pero a pesar de algunas coincidencias, el Atlético de Madrid poco se parece a ese equipo que derrotó al Fulham.  Si repasamos el once inicial frente a los ingleses, solo Domínguez, Perea y Antonio López siguen jugando hoy día, y a estos dos últimos le quedan un par de partidos. La demente política deportiva del Club nos ha hecho cambiar el equipo una y otra vez, hasta llegar hoy día con un proyecto deportivo prometedor, aunque algo inestable, ya que continuamente los jugadores son cuestionados o se les buscan "equipos mejores" por parte de la prensa babosa. Sin duda, la llegada del Cholo Simeone ha aportado la fuerza y el pundonor que necesitaba este equipo. 

Aunque aquel año procedíamos eliminados de la Champions League, nuestro camino por la Europa League fue bastante tortuoso. Empates con el Sporting de Lisboa y el Valencia en octavos y cuartos respectivamente, y una desesperante semifinal frente al Liverpool, que nos permitió acceder a la final frente a un Fulham que había hecho los deberes sin tantos sustos como nosotros. La final fue un sufrimiento, pero eso ya todos lo sabéis. 
El viaje de los leones a punto estuvo de quedarse en Moscú.

Pero este año es distinto. Aquel año tuvimos suerte, ahora nos lo merecemos de verdad. Hemos hecho méritos. Nuestra participación en la competición europea ha sido impecable, de récord. En la fase de grupos solo perdimos un partido y empatamos otro, pero en la fase final nuestros partidos se cuentan como victorias. Sí, todos hubiéramos querido al Sporting de Lisboa en la final, pero tampoco el Athletic de Bilbao ha sido tan potente. Recordamos su contundencia frente al Manchester, pero no han sido tan brillantes como nosotros. Perdieron frente al Lokomotiv, con el Sporting de Lisboa y empataron con el Schalke. 

Ojalá tengáis una despedida el miércoles como os merecéis.
Por eso es nuestro momento. No deberían darnos tanto respeto: les hemos demostrado nuestra superioridad tanto en Liga como en Europa. Somos favoritos en las apuestas. Ellos pueden resarcirse en Copa del Rey, como podríamos haberlo hecho nosotros en Copa en 2010. Por eso el miércoles tenemos que salir a morder, ser nosotros los leones porque no tenemos otra oportunidad. No perdamos la ocasión, no nos arrepintamos el jueves. Nuestro partido sí es a vida o muerte. Es nuestra noche. Forza Atleti.





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